Las habitaciones cuadradas suelen ser más complicadas de amueblar que las rectangulares. Mientras que en una habitación rectangular podemos ubicar la mayoría de los muebles en una sola pared, en una habitación cuadrada tenemos que distribuir el mobiliario de manera más equilibrada, lo cual trae pros y contras. Además, en el caso que abordaremos, tenemos el reto adicional de una columna que ocupa espacio y limita aún más las posibilidades de diseño.
Lo primero y más importante al amueblar una habitación juvenil de este tipo es decidir en qué posición colocar la cama. Esto es fundamental porque, a diferencia de otros muebles como armarios, estanterías o escritorios que se pueden encontrar en distintas configuraciones y tamaños (rectos, de rincón, etc.), la cama suele tener unas dimensiones más rígidas. Por ejemplo, si optamos por una cama clásica para colchón de 90x190 cm con cajones de almacenamiento en la parte inferior, necesitaremos un espacio de aproximadamente 100x205 cm, ya que estas son las medidas estándar más comunes en el mercado.
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Cuando se trata de amueblar una habitación juvenil pequeña de 300x200 cm, la planificación es más necesaria que nunca. Este artículo ofrece un ejemplo comentado que facilitará a aquellos que están comenzando a entender cómo organizar el espacio de manera efectiva. La disposición elegida incluye una litera y un escritorio, permitiendo un uso óptimo de la habitación y creando un ambiente funcional y agradable.
Distribución de los Muebles
Al entrar en la habitación por la puerta ubicada en la pared estrecha, encontramos un diseño estratégico que aprovecha al máximo cada centímetro. En la pared superior de la habitación, la más larga, se ha colocado un armario de puertas correderas. Este tipo de armario es ideal para espacios reducidos, ya que no requiere espacio adicional para abrir las puertas. Su diseño minimalista y colores claros ayudan a mantener la sensación de amplitud.
En este diseño de habitación juvenil, buscamos una distribución práctica y moderna que aproveche al máximo el espacio disponible, manteniendo un estilo fresco y juvenil. A continuación, te explicaremos dos opciones de diseño para esta habitación, explorando la mejor forma de distribuir los muebles y crear un ambiente equilibrado y funcional.
Primera opción: Bicama con cajonera integrada
En la primera opción de diseño, hemos optado por una cama con cajonera integrada, una solución ideal para habitaciones juveniles que necesitan maximizar el almacenamiento sin sacrificar estilo. La cama, situada junto a la pared, no solo ahorra espacio, sino que permite un área libre en el centro de la habitación para moverse cómodamente.
Bajo la cama principal, encontramos varios cajones de gran capacidad, ideales para guardar ropa, zapatos, y otros objetos personales. Además, esta cama incluye una segunda cama oculta, que se despliega deslizándola desde la parte inferior. Este diseño es perfecto para situaciones en las que se recibe visitas o cuando dos hermanos comparten habitación ocasionalmente, ya que la cama extra se guarda cuando no se necesita.
La combinación de colores en blanco y azul da un toque juvenil y moderno, aportando un ambiente acogedor y ordenado. Este esquema de color no solo es visualmente atractivo, sino que también ayuda a mantener la habitación con una apariencia limpia y estilizada.
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